PARA VER EL VIDEO, HACER CLIC:
(18) Facebook
PARA VER TODAS LAS FOTOS, HACER CLIC:
(17) Facebook
Vayamos al año 1.990 a recordar algo especial para todos
ustedes y para el propio club, aquel viaje a jugar el campeonato internacional
en San Carlos de Bariloche y como refuerzo entre otros pibes, también
reclutaron en Gral. Deheza a un tal Cholo Guiñazú, que tengo entendido que era
bastante bravo, tanto, dentro como fuera de la cancha y así llegaron a la final
consagrándose Sub Campeones de la mano del Tío Bergero. No fue el único viaje
lindo que tuvieron, en el 91 toco representar al Cheto en Mar del Plata en otro
torneo internacional.
Más acá en el tiempo, los primeros torneos con la reserva y
primera, donde deben haber alegrías y tristezas a montones. Pero un día, llego
la oportunidad de emigrar, es así que en 1.997 desembarca en Irigoyen de Tío
Pujio para jugar el Torneo Argentino B y así comenzó su relación con la Liga
Villamariense de Fútbol, que tiene varios equipos, como campeonatos logrados.
El repaso nos lleva a 1.999 y 2.000 campeonatos ganados con el Playosa Sportivo
Club, con Colón de Arroyo Cabral y los títulos de 2.005 y 2.007, pero en el medio hubo un regreso a Irigoyen y
el campeonato del 2.006 y en 2.008 campeones con Alem de Villa Nueva. Osea,
cuatro años consecutivos siendo campeón con tres equipos diferentes. Luego de
esas alegrías, cambia nuevamente de rumbos y entre esos cambios, llego el
momento de su Cheto, de jugar y conseguir el ascenso y quizás uno de los
títulos más importante, el ser campeón con Independiente en el Clausura del
2.011 y festejar con la familia y amigos de la infancia de un título en el
patio de su casa… en el 2.015 lo repatrio nuevamente Irigoyen y la formula fue
la misma, otra vez bicampeón y ya a los 40 años, en 2.018 campeón con Atlético
Ticino… seguramente en este repaso nos hayan faltado muchas cosas, pero
queremos finalizar con tu despedida en Rivadavia de Arroyo Cabral, allí donde
ya con 45 dijiste basta, hasta acá llegue…
“Fueron muchos años de felicidad y hermosos momentos,
también algún que otro trago amargo… Le quedo debiendo mucho, señora (por la
pelota). Gracias a usted logré muchísimas cosas, conocí muchísimas personas y
recibí el cariño por suerte de muchas instituciones: Independiente Hernando,
Hipólito Yrigoyen, Argentino, Sportivo Playosa, Alumni, Huracán de Las
Isletillas, Ateneo Vecinos de General Cabrera, Colón, Alem, Bell de Bell Ville,
Unión Lagunense, Atlético Ticino y Rivadavia.
Agradezco a cada cuerpo técnico, utilero, dirigente y sin
lugar a dudas a cada compañero, porque sin ellos no hubiese ganado nada.
Gracias a todos por haberme enseñado mucho hasta el último
partido de mi carrera.
También agradecer a la familia que fue siempre el sostén y
el aguante cada día. A mis fieles compañeros que gracias a dios estuvieron
siempre cada domingo: mi madre y mi padre. Ellos enseñaron el camino que hoy
voy a tomar para dejar de jugar al fútbol y hacer lo que ellos hicieron todo
este tiempo conmigo. Acompañar e ir detrás de un hijo...
Gracias a todos… Te voy a extrañar mucho (fútbol)”.
“Seguramente la perseverancia, dedicación y responsabilidad
te llevo a obtener una exitosa carrera futbolista y perdurar en ella...pero sin
duda otras cosas ayudaron: cómo el té de manzanilla tomado antes de cada
partido, el silbido inconfundible e inflable de tu papá y la plantita de ruda que él te pasaba por el
alambrado cada domingo, en cada
campeonato. Son detalles que reconfortan, que dan fe y fuerza, un empujón al
éxito!!!